2003-07-25 03:51
Bueno, vamos a hacer un breve resumen de lo que fue el curso de verano de Jarandilla. Para empezar, es uno de los mejores cursos a los que he asistido. Estar unos cuantos días hablando con gente que entiende y ama la ciencia ficción, ha sido genial. Y he conocido a gente cojonuda, con algunos de los cuales he compartido disputadas partidas de futbolín a horas un tanto intempestivas. Los que impartían charlas tenían estaban entusiasmados, y transmitían ese entusiasmo a los que estaban del lado de allá de la mesa. Además, pelis por la noche: Ghost in the Shell, Brazil, Videodrome... en fin, sin tiempo para aburrirse. Lo único que he sentido es tener que volverme antes de tiempo, pero la época de bolos es así.
Así que vayamos por partes: os cuento un poquito de cada cosa y pongo fotos.
Bruce Sterling abrió, una vez más, el curso, y habló de la ciencia ficción como una arte decorativa, y de como la verdadera tecnología, la que afecta a la vida, es bastante aburrida, como las bombillas. También habló del NetArt, y como porqué no había producido una gran obra de arte. Traducía, a su lado, Andoni Alonso, el director del curso, y uno de los autores de
La Nueva Ciudad de Dios
Siguió, precisamente, el otro autor de ese interesante libro/sitio/CD:
Iñaki Arzoz
Su charla fue la charla de un experto en ciencia ficción de dentro de 100 años: habló de los nuevos géneros de dentro de 100 años: hipernarraciones, novelas-río de ci-fi, la escritura en nuevas lenguas francas, las
holoesferas aleph, y, en general, como será la ciencia ficción en una época que ya es, de por sí, ciencia ficción. Muy interesante la charla.
Al mediodía, combatimos el calor con ayuda de unas Mahou.
El agente Smith, infiltrado, aparentaba ser un humano.
En Jarandilla se pueden ver todavía anuncios como este
El día siguiente comenzó con una genial charla de Angel Salas, el director del Festival de Cine Fantástico de Sitges, sobre las
rubber realities, las realidades alternativas en su diferentes forma: sueños, realidades virtuales, amenizado con cachos de pelis que se veían un tanto mal por la joía protección de copia de los DVDs. Recorrió desde ExistenZ hasta Tron, pasando por prácticamente todos los demás títulos en los que aparece ese concepto.
Tras una charla de
Juan Zapater, que comentó la película que se había visto el día anterior, Ghost in the Shell, y la comida donde fuimos atacados por las noticias del día y un abejorro del tamaño de un gorrión, tuvimos mesa redonda donde participaron todos los mencionados anteriormente y servidor de ustedes.
Yo hablé del
cyberpunk y otras yerbas; ahí tenéis la charla completa para que la disfrutéis. La idea básica es que el ocio es el negocio, y viceversa. Todo ello pasado por el cyberpunk, claro está.
En fin, que los organizadores cuenten conmigo; soy capaz de ir hasta de ponevideos, si me lo piden, o de alumno, o de organizador del torneo de pingpong-futbolín. Y una vez más, gracias por haberme invitado.