2003-11-23 18:08
Muchas veces se ha dicho que el fenómeno bloguero
tiene que ver con la gestión del conocimiento, en el sentido que sirve para que los
memes, o sea las unidades mínimas de transmisión de conocimiento, se propaguen eficientemente. Teóricamente, el número de copias de un meme, reflejadas en el número de veces que aparece una idea determinada, o bien por el número de veces que se enlaza a una historia o página determinada, debería de estar correlacionado con la calidad de ese meme.
Pero la calidad es algo tremendamente subjetivo, y, en la práctica, no es cierto que el número de veces que se hable de algo, o el número de enlaces que recibe una historia sea proporcional a su "calidad" (o ausencia de ella). Mi impresión, tremendamente subjetiva, y que quizás habría que probar, es que depende de:
- Quien lo diga: esto es tremendamente obvio; si Dvorak habla de algo, o Shirky, no es lo mismo que si lo hace, no sé, servidor. Esto tiene muchos matices, porque hay que ver porqué esas personas han llegado a ese status (trabajo personal, red social subyacente, pertenencia a un medio popular), pero el hecho es que, dependiendo de quién comience a propagar el meme, llegará hasta los confines de la blogosfera o lo leerán los tres coleguillas.
- Relación medio-mensaje los mensajes sobre el medio suelen tener mucho éxito, al menos en cierta fase. Al principio de la internet, las reflexiones sobre la misma (por ejemplo, esta reflexión sobre el futuro de Usenet enviada en el año 85, causó una hebra larga de discusión, en su tiempo; buscar community+Usenet, restringiéndolo a los 6 primeros años almacenados de Usenet, y encontraréis miles de mensajes. Cualquier opinión sobre la comunidad en la que uno se halla suele provocar fuertes reacciones, tanto a favor como en contra, como la última parida de Dvorak. Una vez más, hay que tener en cuenta el elemento primero: dependerá de quien venga.
- Esto es siempre importante: claridad y concisión. Si escribes un ensayo de 10 páginas sobre porqué crees que la internet es una mierda, quizás nadie te haga caso. Ahora, si te creas un dominio que se llame Internetisshit.org, consigues que todos estos hablen de tí, hasta en sueco. Es más, el sitio está estructurado para una máxima propagación de genes: frases cortas, dosificación de la información... definitivamente un crack.
- Los componentes ideológicos también tienen importancia. El meme puede no tener demasiada calidad, o incluso haber sido propagado inicialmente por una persona no demasiado importante, pero si el espacio ideológico en el cual se sitúa el meme coincide con el de la persona que lo lee, y esa persona tiene interés en que se propague, lo propagará. También sucede al contrario, claro. Al final, el fitness o número de descendientes de un meme tienen que ver con los que estén de acuerdo con lo que dice ese meme. Y cuidado que aquí no digo con los que estén en desacuerdo, porque es difícil argumentar con un meme. Un meme es una partícula pequeñita, un slogan casi, un sound-bite.
- También tiene que ver, claro está, con el número de copias de un meme que haya circulando. Cuando hay muchas copias, se produce la saturación, y nadie se preocupa de hacer aún más copias enlazando a un sitio determinado. Como sucede a los lemmings (aunque en realidad no es cierto), demasiadas copias de un meme conducen a la superpoblación y al suicidio en masa. Saturar con un meme puede ser contraproducente.