2004-01-31 01:00
Hay gotas que colman vasos, y chorros completos que acaban colapsando servidores de correos. Entre el spam cotidiano, los
virus, los mensajes de los administradores de sistema que me avisan de
que hay virus en mensajes que yo no he enviado (los que no se han enterado de que se puede falsificar la dirección de origen del correo), y los mensajes de verdad, que se tienen que escanear para ver si hay virus, a pesar de que yo nunca uso ni Windows ni Outlook ni nada que se le parezca, ahí lo tenéis. Los mensajes tardan horas en llegar, y, a veces, hasta un par de días. La columna de la izquierda de la imagen es la hora de envío, y la de la derecha la hora de recepción; la he cogido aleatoriamente entre los doscientos y pico mensajes que tenía esta mañana.
Lo dicho. Si alguien quiere decirme algo en estos días, que deje un comentario o que me lo envíe por correo certificado.