2004-02-16 01:00
Disney ya no es lo que era, y precisamente por eso, se ha convertido en un bocado goloso para compañías más grandes, tales como
Comcast, una
compañía hasta ahora desconocida para mí, pero que parece que se dedica al cable.
Aunque se conozca a Disney sobre todo por sus películas, lo más valioso que tiene la compañía son sus marcas registradas, que protegen tan celosamente, que a
las leyes americanas dede extensión del copyright se les ha llamado "ley Mickey Mouse".
Si Disney se diluye dentro de una gran empresa, es posible que las marcas también se diluyan, o incluso se vendan; lo que es probable es que se pierda la cultura de la empresa, si es que no se ha perdido ya, y por eso precisamente se han hecho vulnerables a una adquisición. Pero también es posible que se potencie esa protección de las marcas. Incluso es lo más probable. ¿A que no sabéis quien tiene un
7% de Comcast?; de esto habla también hoy
Somiatruites. Efectivamente, el
imperio del mal. Pero lo más curioso es que el hecho de que una compañía de
tuberías, es decir, de telecomunicaciones, aliada con una compañía de todo, como Microsoft, trate de adquirir una compañía que básicamente es de contenido. Es el
contubernio disco-teleco-atómico del que ya hablamos en su tiempo.
Al final, ¿quién gana en todo esto? No tengo ni idea, pero como hagan Rey León 4 es pa matalos.