2004-10-14 01:00
Aviso: este artículo posiblemente resultará terriblemente aburrido a todos los que no estén interesados en leyes de potencias, especialmente el artículo titulado La Larga Cola, del que han hablado casi todo el mundo, incluyendo Linotipo, Julio Alonso, y servidor de ustedes, de profesión, sus leyes de potencias. Por cierto, fernand0 también habló. El resto, puede que aprenda algo.
Ya indiqué en el artículo aquél de
las paradojas de las leyes de potencias que había algo que no me encajaba en el artículo de Chris Anderson. Primero, no estoy seguro de que las ventas unitarias y por pasta de libros se ajusten a una ley de potencias, y no he sido capaz de encontrar ningún fichero (y no,
Julio Alonso, en los
SEC filings de Amazon no creo que vengan). Lo más parecido que he podido encontrar es
esta tabla de venta de cómics americanos por editoriales, donde está bien claro que los que venden menos
no venden más, ni por unidades ni por dinero, que los que venden más. De hecho, si quitamos DC, que es el segundo, todos los demás no son capaces de vender tanto como Marvel, que es el primero. Eso sí, todos juntos venden más que el primero, pero entre el primero y el segundo copan casi el 70% del mercado.
Pero vamos a la ley de potencias en sí. Voilá un gráfico.
Aquí he trazado los porcentajes acumulativos (puede ser popularidad, enlaces o lo que queráis) para diferentes leyes de potencias: x
-1/2 (negro), x
-3/4 (rojo), x
-2 (azul) y x
-3 (verde).
Todas son leyes de potencias, sin embargo, cambia mucho el panorama si el exponente es mayor o menor de 1. Si es mayor que 1, ni de coña los de la cola larga pueden vender más que los que venden más. Si es menor que uno, sí tienen alguna posibilidad; hace falta irse al elemento (o lo que sea) 1000 o 2000 para alcanzar el 50% de la popularidad (o lo que sea, ventas, enlaces).
Por lo tanto, si lo que dicen en el artículo es verdad, debe de tratarse de una ley de potencias con el exponente cerca o menor que uno, pero tampoco estoy muy seguro de que sea así.
Lo que sí es cierto siempre es que las leyes de potencias tienen esa
cola larga de la que trata el artículo: su valor desciende muy lentamente (en una exponencial, o potencial, desciende mucho más rápidamente, por ejemplo), y hay algunas ventas (en el caso de que se trata) o alguna popularidad, o lo que sea, incluso muy alejado de los primeros puestos.
Y lo que también es cierto es que de lo que en realidad trata el artículo, es de cómo aprovecharse de la popularidad de los que más venden para vender de los que menos venden. Pero eso ya será otra atalaya.