2005-10-24 16:30
Martín Varsavsky hace un curioso paralelismo entre el papel del profesor como intermediario entre los alumnos y el conocimiento, y su eventual desaparición, y la publicidad como intermediario entre el producto y el cliente, y su, supongo, eventual desaparición. Lo que sólo puede agradarle a
Alvy, y es posiblemente cierto. El problema es que la publicidad no desaparece, sólo cambia de forma.
Según Varsavsky, la señora del detergente es una terrorista que hace que la gente pague para quitarla de enmedio. Lo bueno de los blogs es que uno no necesita de la publicidad.
FON no necesita de la publicidad. Por lo pronto. La idea ha molado, todo el mundo lo enlaza, incluso BoingBoing. Los blogs transforman ideas en noticia, sin ninguna inversión publicitaria.
Con una idea potente, la gente dona cosas. Un tal Richard le ha donado el diseño del sitio web, otros le diseñan ideas para un spot de televisión. Estaría bien si apareciera
Cálico Electrónico, y comprara el FON en Electrónica Web.
Hala, ya no digo más hasta que no tome café otra vez. O si. Ya veremos.