2006-03-04 17:52
La casi siempre interesante
Mind Hacks habla del libre albedrío, y su erosión en la sociedad moderna. Reflexiona sobre
esta predicción de Shirky, que dice
...everyone from advertisers to political consultants increasingly understands, in voluminous biological detail, how to manipulate consciousness in ways that weaken our notion of free will.
O sea
Todos desde los anuncadores hasta los consultores políticos entienden de forma creciente, con un detalle biológico voluminoso, como manipular la consciencia de formas que debilitan nuestra noción de libre albedrío
Tom Stafford no se inclina por llevarle la razón ni por quitársela. Distingue claramente entre persuasion y coerción, y dice que, si hay influencia de la publicidad, es más persuasiva que coercitiva; y que si uno no es afectado por nada de lo que le rodea, en realidad tiene un libre albedrío que sirve para poco, porque no haría absolutamente nada. Pero, al final, tira la toalla y dice que, para él, es imposible decidir si existe manipulación o no, porque, aunque no la admite en si mismo, si que la reconoce y ve en los demás.
Y yo no voy a ser menos tirando la toalla. Aunque es cierto que, como supongo que casi todos los que leen esto, no llamo a los teléfonos de la teletienda ni me suscribo a las enciclopedias en cómodos fascículos, si es cierto que me compré los
lápices de
Alvy, que añado a mi lista de deseos casi todos los libros que recomienda
PJorge y que estoy de acuerdo con casi todo lo que dice
fernand0, si es que no me he formado una opinión antes sobre el tema. De donde se deduciría que leer mucho acaba con tu libre albedrío; pero también que es complicado estar analizando pros y contras de todo lo que uno decide a lo largo del día, y que es mucho más cómodo externalizarlo. Hacer
outsourcing, vamos. Lo que sólo puede aumentar en el futuro, con los
asistentes personales.