2006-04-11 09:09
Hace ya
unos cuantos añitos, cuando los ID de historia de blogalia tenían dos cifras, hablé yo de la LSSICE. En aquella época, que eran finales de 2002, se montó un buen pollo, con cierre de páginas como
Kriptópolis, y una gran campaña en la entonces relativamente incipiente blogosfera.
Yo dije entonces que
no era para tanto. La principal objeción era que se iba a usar como instrumento ideológico para cerrar páginas no afines al gobierno (o gobiernos) por la puerta de atrás, sin necesidad de probar ningún delito, sino simplemente usando el hecho de que el autor de una página, que se está lucrando de ella, no tiene toda la información necesaria para identificarse. Y el problema es que esa directiva no sólo se aplicaba a sitios que vendían cosas (lo que por otra parte sería totalmente natural), sino también a sitios que el único producto que ofrecían era el contenido. Supongo que en este último caso se trataba de facilitar la labor a Hacienda, pero lo malo es que ni siquiera hacía falta probar que había delito fiscal, ni de qué cuantía. La pena se ponía antes que la prueba del delito, y se cerraba la página.
A mi me gustan los matices, y no me voy a desdecir totalmente de lo que dije entonces; si no ha sido para tanto hasta ahora, de repente, no va a a serlo. Pero si es para más que lo que yo había dicho. Es peligrosa. No mucho, pero peligrosa. Si has fastidiado a alguien que tiene mucho tiempo y/o mucho dinero, como el
caso de la SGAE en el cierre de páginas de enlaces, debes tener cuidado y/o un buen abogado.