Atalaya: desde la tela de araña

2007-10-23 17:17 Constantine no tiene poderes, frecuenta malas compañías y tiene varios vicios más o menos inconfesables, pero es capaz de luchar con el demonio por el alma de un amigo, y chantajear a un arcángel, y enfrentarse al mismo Etrigan si fuera necesario. Por eso me gusta: un antihéroe cuyo principal defecto es andar al albur de dibujantes y guionistas, que lo llevan por un lado u otro, más americano, más inglés, más sobrenatural, menos, y así, en plan yenka, hasta que un buen día abandonen el personaje y se lo carguen en una crisis de tierras infinitas.
Miniseries como este contribuirán precisamente a que suceda eso. Usando el nombre de Constantine como enganche, y un miembro lejado de la familia, cuentan la historia, por otra parte interesante, de una rebelión de esclavos en el Nueva York del siglo XVIII, mezclándola con una historia de vudú y del propio Papá Midnite, con un guión muy cogido por los pelos y en el que, al final, si quitas al bueno de Constantine, no pierdes absolutamente nada. En resumen: que no te gastes los 10 lerus en esto, y espera que lo vuelva a coger otro guionista. El dibujo, por otro lado, bien.