Atalaya: desde la tela de araña

2008-06-02 20:57 Según me comentó Antonio, Bruselas tiene tanta fama de aburrida que hasta hay una iniciativa para promoverla como ciudad mega-super-chuli. ¿Cuál es mi experiencia sobre el tema? Aparte del hecho de que siempre conviene dejarse guiar por locales como el susodicho Antonio, que igual te lleva a un botellón que al bar con más cervezas del mundo (excepto precisamente la que nosotros queríamos, la Kwak), lo cierto es que hay cientos de sitios donde saciar cualquier tipo de necesidad de marcha y cachondeo. Evitando los vapores emitidos por los mejillones en el Îlot Sacré, la zona contigua a Bourse ofrece multitud de restaurantes y bares (como el Fin de Siécle y sus jamboneaus); la zona de Sablon/Zavel, aun siendo turística, tiene también terracitas, salones de té y demás pijadas, y siempre se puede tomar uno una Jupiler (que no Jupiter) prácticamente en cualquier banco o esquina.
Es cierto que hay zonas que se quedan desiertas al caer la tarde, cuando los funcionarios dejan de funcionariear y se van, maletín en ristre, fuera de Bruselas. Pero, fuera de esos paisajes desiertos, siempre hay una cerveza que beber y gente por conocer.
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