2008-06-18 18:37
Vamos a ver si podemos explicar lo de la
huelga de transportes y sus efectos echando mano de las redes (igual que el
fútbol).
Es bastante fácil: la actuación de los piquetes ha sido un caso clásico de
ataque a los conectores. Se trata de bloquear los puntos de distribución (centros logísticos, mercados mayoristas, lonjas, peajes de autovía, y sitios por el estilo). Como en el ciclo de vida de una ruta camionera tarde o temprano se acaba pasando por alguno de ellos, bastaba una minoría de gente
informando con bates de béisbol y navajas de Albacete para bloquear la distribución a nivel global. Por eso, con respecto a la cantidad de gente movilizada, el efecto ha sido desproporcionado. Ya no se trata solo de que no hubiera leche en los supermercados, o galletas, o coca-cola, sino de que las fábricas se han quedado sin material al que echar mano. Rotas las conexiones de la red, los nodos mueren de inanición.
Se podía haber evitado si esos mismos nodos hubieran tenido otras conexiones; preferiblemente, unas que no se pudieran cortar tan fácilmente. Por ejemplo, ferrocarril. Resulta divertido, pero en un pais donde cada vez que se inaugura una línea de alta velocidad va el presidente del gobierno,
hay menos vagones de carga que en el año 70. 30000 menos, que son 30000 camiones más en la carretera. Que es lo mismo que ha pasado en todos sitios, pero en otros paises, incluso menos extensos que España (Austria, por ejemplo) tienen más. Francia tiene cuatro veces más, por ejemplo. Como cuenta
Andrés Martínez soto en su blog:
Todos sabemos la política (incorrecta para mi) que tiene Renfe operadora, sobre el servicio público de transporte de mercancías, que es dejarlo abandonado, y muerto para que nadie (las operadoras privadas de mercancías) pueda hacerlo resurgir del desguace en el que se encuentra inmerso.
Así pasa lo que pasa:
los demás paises nos regañan por no cumplir el protocolo de Kyoto, porque el transporte por ferrocarril es más eficiente energéticamente. No sólo eso, sino que evita accidentes, deterioro de las carreteras y es más barato.
Y también evita que una huelga de transporte en carretera lleve a un país al caos. Volviendo a las redes, cuantos más conectores (ferrocarril, carretera, fluvial), más difícil es hacerle pupita a la red.
Etiquetas: redes, transportes, huelgas, chucuchucuchú