2008-11-29 11:11
Después del
debate y mesa redonda sobre ciencia e Internet me quedó un cierto mal sabor de boca, porque quizás no hablé de cosas que me tocan más de cerca y que podrían haber sido interesantes para el público. Aunque ya dije al principio que hablar de ciencia en internet es como hablar de sexo en internet, hay muchos temas calientes y en cualquiera de los casos es muy probable que el que escuche se quede insatisfecho, lo cierto es que para eso tiene uno un blog y puede contar las cosas que se le han quedado en el tintero. Y lo voy a hacer a través de varios posts (que complementarían a
éste (llamémoslo Ciencia e Internet 0) y a
aquella de 1-100-blogs (llamémosle CeI-1)
Casi cualquier proceso que hagas en ciencia pasa por escribir mucho. Escribes correos electrónicos a tus coautores, escribes programas para probar las ideas o algoritmos que se te han ocurrido, escribes los resultados, escribes el resultado de procesar los resultados. Desde que existe la Internet, y desde que existen una serie de herramientas de colaboración online, es muy fácil hacer todo ello en Internet. No solamente en tu ordenador para transmitirlo por Internet, sino en la propia Internet.
¿Cómo se puede trabajar en Internet para escribir un artículo y conseguir publicarlo? Voy a decir cómo lo hago yo, lo que le puede servir o no a cualquier otra persona. Y parto de la hipótesis de trabajo de que la ciencia debe ser libre; no solamente para que otros se beneficien, sino porque debe ser totalmente transparente para que
realmente sea reproducible. Si no lo es, no es ciencia.
Lo más fácil es enfocar el proceso de creación de un artículo como el de un proyecto de software libre. Trabajas sobre una forja, tal como
Sourceforge o
la forja de Rediris. Comienzas con una lista de TODO y a partir de ahí vas creando
el programa. Si alguien está interesado en tu trabajo (posiblemente sólo los que colaboren contigo, pero podría ser también quien te ha dado dinero para llevarlo a cabo, mamá estado o mamá UE) puede seguirlo por CVS. Eso tiene la ventaja adicional de mantener una copia de todo lo que estás haciendo, para evitar perderlo, y más ventaja adicional todavía de tener un sello temporal y un historial de revisiones, que te permite saber en qué punto estabas en el trabajo en el momento que enviaste algo a publicar.
Terminado el desarrollodo (o más bien parado en un punto), hay que comenzar a hacer experimentos. Los experimentos tienen siempre un grado determinado de cocinicas, que consiste en los parámetros necesarios para que algo empiece a andar. Esos
ficheros de parámetros pueden estar también en la forja, con todas las ventajas que he mencionado anteriormente. Y cuando se obtengan resultados,
también se pueden colocar en la forja, para que cualquiera pueda verlos
en crudo y sacar sus propias conclusiones (sean las mismas que tú u otras diferentes).
Lo importante en todo esto es que trabajar de esta forma permite acceder libremente no sólo al resultado final, edulcorado, cocinado y tratado para mayor gloria de los autores, sino a los pasos intermedios e incluso a los fallos.
Posiblemente a nadie le interese. Pero, en cualquier caso, estarás siguiendo un proceso que beneficiará a tu forma de trabajar, y te permitirá abordar trabajos más sistemáticamente.
Etiquetas: ciencia, internet, ciencia+internet, ciencia&internet, y otras conjunciones también posibles