2003-03-17 04:52
Después de mirar los anuncios de productos de alta tecnología en viejas revistas (de hace 20 años, nada menos), y contemplar
los productos de la siguiente década aparecidos en Wired, uno se pregunta, ¿qué es lo que define estéticamente lo
moderno?
Es curioso, y 100% natural, que lo moderno sea un concepto que cambia cada época, casi cada día. Normalmente se asocia a lo nuevo, todo lo nuevo nos parece moderno, y palabras que definen lo nuevo suelen incorporarse al lenguaje como sinónimos de moderno; por ejemplo, "moderno" o "guay" se dijo en Argentina, durante una época, "esto es efe eme", por la radio FM, que se acababa de introducir.
También, por alguna razón, va asociado a "limpio". Moderno, limpio, nuevo se suelen confundir en los anuncios: los productos que tratan de que compremos lo querramos o no suelen aparecer brillantes, refulgentes, recién salidos de inmaculadas cadenas de montaje atendidas por operarios-astronautas con monos integrales de celofán de diferentes colores. ¿Recordáis aquél
anuncio de Intel?
También es curioso ver que la estética de lo postmoderno o afteralgo está generalmente asociada a una vuelta al pasado: los nuevos románticos, los neogóticos, a la vez eran postmodernos y afterpunk, GTA Vice City, lo más moderno en juegos, vuelve a la estética de los 80 (fuera lo que fuera eso), y cualquier día de estos nos vemos con peinados a lo garçon como en los años 20.
Y yendo un poco más allá, ¿cómo es la estética de lo futurista? Sería un poco como lo moderno, pero más. Mirando a esas exposiciones universales donde se ven imágenes de un siglo XX imaginado, mezclan la modernidad con la ilusión añadiéndole una pizca de utopía.
En un mundo podrido y sin ética, lo único que nos queda es la estética A ver si a base de ser conscientes de la estética de lo moderno, vamos poquito a poquito camininando hacia una ética del futuro. Yo, por lo pronto, me voy a poner a pasar la aspiradora a mi casa.