2009-07-13 08:00
La serie
Ex Machina, de la que
ya hemos hablado, usa como excusa el personaje principal, un superhéroe que es capaz de hablar con las máquinas, para recorrer los diferentes asuntos de la política americana: aborto, matrimonio gay, educación, sanidad... Tras acordar su retirada de la superheroicidad activa (a lo Watchmen), Mitchell Hundred se convierte en alcalde de Nueva York. En este episodio el Papa le solicita audiencia para comprobar si se trata del anticristo o no, lo que es aprovechado por otras figuras sombrías para cargarse a uno y echarle la culpa a otro, o viceversa.
Como todos los cómics de autor, se trata de una historia bastante coherente, tanto en dibujo como en guión, y tiene un toque a veces provocador y a veces divertido que es lo que hace que la serie sea, para mi, interesante. Este episodio me ha gustado más que, por ejemplo, las
historias tremendas de Alan Moore, así que habrá que darle un
4 de 5.
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