2009-12-24 11:20
Primero del lote de cinco libros de crímenes de autores europeos prestado por
Mariquilla, es el octavo de la serie de novelas protagonizadas por
SalvatoreSalvo Montalbano, un comisario de policía en Sicilia. Y aquí es cuando se te ponen delante de la mente la nube de tags asociada con Sicilia: mafia, mozarella, señoras pechugonas con mandiles y trajes estampados, gente chillando, todo eso. Bueno, pues sí, pero tampoco tanto. El tema principal es la desaparición de una chica, Susanna. Salvatore (Salva para los amigos), convaleciente de un tiro recibido en el libro anterior de la serie, vuelve temporalmente de su convalecencia para echar una mano en la investigación. Por ella pasan el jefe inepto, el ayudante beato del mismo, el subalterno paleto, el político corrupto, la amante con carácter, y en general casi todos los tópicos que cabe esperar de una novela que sigue la dieta mediterránea versión policial.
Pero se hace con sentido del humor, presentando el diálogo interno del protagonista con sorna, y la interacción con el resto de los personajes con una mezcla de sorna y cariño que resulta bastante entrañable.
¿Y el crimen? Bueno, su resolución va avanzando a buen ritmo, se van colocando pistas, algunas sutiles, y se va dejando al lector que vaya reconstruyendo lo que ocurrió. No se hacen trampas, no se sacan conejos de la chistera, así que no se rompe en ningún momento el pacto entre el lector y el escritor, lo que es de agradecer.
Así que a mi me ha gustado, lo he leído en un día, y lo recomiendo. No sé si será el mejor de la serie, ni siquiera para introducirse en la misma, pero está muy bien. Lo podéis adquirir, por ejemplo, en
librerías Babel o en vuestra librería en Internet favorita.
Etiquetas: spaghetti, pesto, la mamma, y todos esos tópicos...