2011-07-26 08:20
Después del
arte lineal conceptual de Ware, bajarnos a esto puede parecer paradójico, pero es que el cómic lo es, incluye lo más avanzado y lo que apela a los más bajos instintos y a los más primarios. Como son los colores del Capitán América: blanco, azul y rojo, la bandera americana, y su ideología: se debe al pueblo, aún siendo parte del pueblo.
Tampoco sé por qué diablos me lo compré. Yo siempre he sido de Patrulla X y Spiderman, nunca me ha llamado la atención el personaje, por patriotero, pero también por simple. Da guantás. Tiene un escudo. Que es como decir que Spiderman trepa y tira redes, lo sé, pero es que realmente el personaje no da para mucho. En este libro tratan de buscarle un poco las vueltas, y es encomiable en ese sentido. El primer arco argumental lo elevan a la categoría de mito, y luego vuelven ese status contra él. Y el segundo,
Pesadilla parasita el sueño americano y se enfrenta con el Capi en un entorno poco habitual. En ese sentido resulta curioso: coloca al personaje fuera de su ring (luchando por los corazones y las mentes, y en un entorno mágico) a ver qué es lo que puede hacer. Y lo que hace es lo que es de esperar: dar guantás hasta salirse con la suya.
Por lo menos, el cómic sirve de preparación para la próxima peli, que a su vez sirve de preparación para la esperada peli de los Vengadores. Que espero que venga pronto, porque si no en el ínterin soy capaz de comprarme cómics hasta de la bruja escarlata.
Etiquetas: tebeos, vengadores reuníos, y qué mono sale en las portadas, el Capi votó por Obama