2012-06-03 19:01
No sé muy qué decir de
este libro. Encima que me lo ha regalado
JAB y
dedicado y todo, no lo voy a poner verde. Tampoco le voy a echar flores, porque sepan que JAB es una mala persona que no hace más que quitarme alcaldías en el
FourSquare, y cuando lo veo me hago el despistado, pero en realidad lo odio mucho. Además, todavía no le he perdonado que se vayan a desayunar sin mi o conmigo de cuerpo presente, que una cosa es odiar mucho, y otra querer desayunar a solas como si fuera, no sé, alguien que desayuna a solas.
Afortunadamente, soy una persona de recursos, así que le encargaré a mi gemelo maligno, que tiene mis mismas iniciales, pero al revés, que lo haga. Mi gemelo maligno no conoce de nada a JAB, y de hecho ni siquiera sabe leer, siendo ciego de nacimiento por parte de padre. Él me dictó esto:
El libro que tengo entre manos tiene una portada muy suave. El montón rugoso que he podido quitar con la uña tiene un origen ignoto, pero es posible que se trate, por el olor, de algo totalmente diferente al relleno de donut. Por dentro es cálido cuando llevo frotándolo un rato y menos cuando empiezo a hacerlo. El hecho de que, dejado a su amor, se cierre solo indica que, en realidad, no lo ha leído nadie. Por lo que no puedo más que recomendarlo, dado que la existencia de libros no leídos me causa una profunda zozobra que, por mi desgracia de nacimiento por parte de padre, no puedo de ninguna forma solucionar. Leedlo, por favor.
En realidad, no vais a hacerlo. Leerlo, digo. Porque la adquisición de este incunable es algo sólo reservado a quien se encuentre personalmente a JAB y le ofrezca sobornos cuantiosos en forma de trenes privados, autogiros, mientras simultánemente le dices que, total, ese cómic que le has prestado y que no te ha devuelto se lo puede quedar por muchos y muchos años. Amén.
Etiquetas: en, realidad, es bastante divertido y original, línea clara, con una malafollá granaína, considerable, y con personajes entrañables, a la vez que gilipollas