2012-10-04 17:09
El
último de la
serie indridasoniana, mayormente porque
sólo queda uno, en islandés, que todavía no ha sido traducido. Tiene su punto leerse la saga del tirón porque este libro es más o menos simultáneo al
anterior, Outrage y una vez más sustituye a Erlendur por otro de los miembros del grupo, Sigurdur Öli, el que habría querido ser protagonista de la serie Cops y que se mueve principalmente por orgullo y soberbia, por demostrar lo mierdas que son los delincuentes y lo que él vale, igual que Elínborg se mueve por pundonor y Erlendur, quién sabe, buscando redimirse de la pérdida de su hermano y tratar de hacer justicia a las víctimas, independientemente de que llegue en un juicio o de cualquier otro lado.
Por todo eso el narrador se distancia un tanto con el personaje, que por hacer un favor a unos amigos a los que están chantajeando se encuentra a una chantajista víctima de un crimen. Lo que parece al principio una simple venganza de alguien chantajeado, amiguete de Sigurdur Öli o no, se acaba convirtiendo en una narración de los hechos que llevaron a la
crisis financiera islandesa, lo que finalmente acaba teniendo su influencia en la resolución del crimen. O los crímenes.
Mientras tanto, el protagonista, recién divorciado, examina su relaciones con su antigua esposa y el resto de su familia. La familia en Islandia siempre es importante, lo que también se ve en otra trama que procede de
Hypothermia y que se desarrolla de forma paralela, la de Andrés y su padrastro.
En resumen, interesante por el ambiente y los datos que se dan sobre la crisis bancaria y también por introducirte en el alma del tercer policía mientras Erlendur ni está ni se le espera, enfrentándose también a sus propios fantasmas.