2012-12-28 12:02
Ya sabéis aquello de que cuando Mastropiero hacía cosas por encargo el resultado era mediocre y cuando no era por encargo... no hacía nada. Bueno, pues este es es un libro hecho por encargo de
British Airport Authority, que ahora parece que está cambiando de nombre a Heathrow. Se trataba principalmente de estar en ese aeropuerto durante una semana como
escritor residente. Como Castle en la policía de NY, pero con otro tipo de uniforme con alitas.
El resultado es bastante parecido a
su otro libro sobre el trabajo. Una deconstrucción del quehacer aeroportuario que convierte cada pequeño objeto o persona en algo trascendente, que rastrea hasta sus primeros orígenes (a veces imaginados) cada empleado, cada máquina.
El libro está ilustrado con una serie de fotos que, si no históricas, sí tienen su gracia. En resumen, un libro que te hace pasar un rato agradable y, pese a la trascendencia que le da a todo, relativamente intrascendente