2013-08-10 00:44
El verano es época propicia para empaparse tochos de mil páginas, por eso tradicionalmente he echado en la mochila uno de estos ejemplares para leérmelo entre playa y piscina y raticos en los que pueda uno pillar un poco de sofá. Los tochos, sobre todo si están en rústica, tienen múltiples ventajas: tienen más enjundia y ocupan menos en el equipaje. No tienes que
jugar a los enchufes musicales para cargártelos y son, si no impermeables, al menos sufren una degradación escasa al mojarse y luego secarse. Además, al leerse en un menor espacio de tiempo, no tienes que andar consultando el índice onomástico a ver si Justine era una senadora de la familia Burnelli o un mutante Silfen venido del espacio exterior.
Asi, otros años han caído
A Man in Full y
Titus Groan e incluso
las Empresas y Tribulaciones de Maqroll el Gaviero, y este año la estoy emprendiendo con
Judas Unchained de la saga de la Commonwealth.
Hay un problema con estos libros. Que se acaban las vacaciones y no se ha acabado el libro. Intentaremos que no ocurra.