2015-08-07 19:01
Este libro cayó en mis manos por el procedimiento de estar en el sitio correcto en el momento adecuado y como estoy harto de verlo por todas las librerías por las que paso y por muchas manos de gente que se ve leyendo por playas, metros y piscinas, me propuse leerlo. Con expectativas incorrectas. Lo que ha sido todo un error.
Para empezar, incorrectamente pensaba que el autor era islandés. Los islandeses son amigos de sagas. Así que pensé que esto sería una saga de un anciano que, venciendo a las dificultades, logra escapar de algún sitio para ir a conocer a Björk o evitar la muerte de los frailecillos o alguna cosa de lo que los islandeses sean amigos a estas alturas. Pero no es así. No es nada serio, aunque sí acaba siendo una saga. Una especie de Forrest Gump pasado por el norte y la nitroglicerina y que abarca todavía más años y más guerras. Hasta la de Corea. A través de las peripecias de Allan Karlsson, experto autodidacta en explosivos, vamos descubriendo la historia del siglo XX a través de personajes basados en los reales y otros totalmente inventados, como el hijo tontorrón de Einstein, Herbert.
Y la decepción no es buena consejera. Aunque el libro es entretenido, mezclando la historia contemporánea con las peripecias del abuelo y la gente que se va encontrando, los personajes son meras caricaturas, la acción bastante informada pero absurda (y con algún error como mencionar los B52 en la segunda guerra mundial) y la resolución un final como otro cualquiera que tiene cierta guasa pero nada más.
En conclusión, una lectura fácil y veraniega. Poco más.
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Comentarios
1
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De: Lucía |
Fecha: 2016-05-24 18:16 |
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Tiene algunas escenas que rozan el esperpento, pero en general me pareció entretenido. Una lectura ligera de las que apetecen en épocas veraniegas.
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2
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De: JJ |
Fecha: 2016-06-11 12:22 |
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Sí, no pasa de eso. Gracias por comentar.
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