2015-08-27 20:21
Una reflexión previa al comentario de
este número: en serio, no sé qué le ve la gente a Nancy Kress. Las $n historias últimas publicadas en Asimov's son prácticamente iguales: un mundo en el que ha sucedido alguna catástrofe, y hay extraterrestres/inteligencias/lo que sea manejando un castillo/burbuja/muralla en la que pueden/no pueden entrar los terrestres. Cuando entran aprenden cosas. La de este número, "The common good", hay burbuja, extraterrestres y gente que entra. Y todo es predecible. Y no pasa nada. Los personajes son súper planos. Y es demasiado larga. Pero igual aguantaría uno todo eso en una autora que estuviera empezando su carrera. En este caso, el problema principal es que ya he leído esa historia. "Nothing Human", por ejemplo. "An alien light". Con un ligero retruécano, "Mendigos en España", donde la catástrofe es que aparece una raza de gente que no necesita dormir. Y lo peor es que llevo diciendo lo mismo de ella
desde hace siglos (vale, con pequeñas variaciones, pero es que tiene tres o cuatro fórmulas que se parecen mucho, todas con el tema apocalíptico o escatónico). El único que me gustó
fue este, con "Safeguard". En fin, por las críticas que veo en Amazon parece que es una autora en declive. Todos los autores usan fórmula. Es la clave del éxito. Pero la fórmula debe ser menos transparente y no conseguir que cualquier historia te suene a cualquier otra. La mejor, "Memorials", de Aliette de Bodard, una autora emergente que mezcla un tema étnico con descubrimientos personales y está conseguida tanto en ambiente como en personajes; basada, sobre todo, en la posibilidad de eternizar a los muertos creando avatares... y traficando con ellos. Mola. "Primes", de Ron Collins, es sumamente curiosa: basando su estructura en los números primos, mezcla conceptos de control mental con la idea de una red social y la publicidad subsiguiente alimentando directamente al "feed" cerebral, una idea que viene, al menos, de "Mercaderes del espacio", pero que en esta historia está bien ejecutada y con un final redondo.
El resto de las historias cortas, sin ingún autor realmente conocido, también son bastante notables. Así que si hubieran eliminado la de Nancy Kress habrían hecho un gran número.