2018-07-04 10:46
Este es un
libro libre, parte de una trilogía también libre, y que por tanto puedes empezar a leer ya mismo, si te apetece.
A mi, de hecho, me habría gustado empezar a leerlo antes: lo busqué en una librería del mismo Seattle, donde reside la autora, y no lo encontré. Al habla con
ella en Twitter, me comentó que eran libres, así que me los descargué todos. Tras acabar con el
libro de Ekaterina Sedia, otra autora rusa de fantasía urbana, llegó el turno de este.
No será el último. El libro va sobre sirenas (que también aparecen en "La historia secreta de Moscú" como parte de los elementos mitológicos que habitan debajo de Moscú), lo que no deja de ser original en el panorama de la fantasía. En la mitología, las sirenas con mitad mujer, mitad pez, y atraen a los hombres a las profundidades con sus cantos.
En este libro, le da una vuelta de tuerca al concepto. De pez tienen sólo las agallas, y además tienen una serie de superpoderes basados en la voz y en el canto. Pero lo interesante es el planteamiento inicial: la protagonista, a la que encontramos en el primer párrafo del libro diciendo en primera persona el título del libro, "Elijo morir", va poco a poco descubriendo quién es, pero eso la lleva también a descubrir quién es, en realidad, su padre, maltratador y posiblemente asesino de su madre, y su mejor amigo.
También descubre a las sirenas, unas sirenas esculpidas en una bañera que la acompañaron en todos los momentos de soledad y se convierten en reales. Canosa es la líder del pequeño clan, y la relación con ella es bastante ambivalente. Las complejidad de las relaciones entre los diferentes personajes son lo mejor de la novela, que aunque en la superficie es un clásico libro de mayoría de edad, se convierte a ratos en un interesante libro de acción y en otros en una historia de horror urbano.
Eso sí, es el primer libro y tiene a veces problemas de ritmo y de puesta en escena. Hay momentos en que no se sabe cómo se ha resuelto una escena para algún personaje, simplemente desaparece. Es posible que no sea tanto un defecto sino un efecto de la narración en primera persona.
En todo caso, un comienzo interesante de una trilogía que no puedes dejar de leer. Y una vez leas, como dice la misma Ksenia Anske,
ayuda al escritor comprando, leyendo, reseñando sus libros y haciéndolo una y otra vez.