2019-06-09 20:22
Supongo que uno de los mayores elogios que se le puede hacer a un escritor es que te deje con ganas de más de sí mismo. Karin Slaughter es así: te agarra y no te suelta, y cuando acabas un libro buscas el siguiente.
En este caso, Cop town ni siquiera es de ninguna de las series en las que se encuadran los libros que ya he reseñado. Es una historia que va hasta los años 70 en Atlanta y sigue a mujeres policía, una de ellas, Kate, en su primer día de trabajo.
Es posible que no se llame Kate. Acabé de leerlo hace ya unas semanas. Se me acumulan las reseñas y todavía tengo dos más en la faltriquera antes de ponerme al día. Los nombres no son importantes, sin embargo, ni se trata de contar y estropear la historia, sino de describir el poso que queda.
El trasfondo es la existencia de un asesino de policías que acaba de cargarse a uno en la mañana del debut de Kate. En una policía totalmente segregada por sexos y por color, para Kate el reto real es poder aguantar los insultos y el abuso de sus propios compañeros de trabajo. También de las compañeras que no ahorran novatadas.
El punto de vista del asesino lo conocemos desde el principio. Karin nos provoca dándonos más información que la que tienen las protagonistas, jugando con nosotros y manipulando nuestra percepción, dándonos sólo lo que quiere que sepamos. Es un exsoldado, cuya vida ha sido tocada, como la de casi todos los protagonistas, por la guerra del Vietnam. Un estrés postraumático que se manifiesta en querer hacer de la vida de los demás un infierno.
En el dibujo de los personajes y en la presentación de una época, Karin posiblemente ha escrito uno de sus mejores libros. La evolución de Kate y la psicología del asesino y del resto de los personajes es tan plausible y rica como en el resto de las novelas. Así que Karin Slaughter, una escritora que me descubrió mi hija Elena, sigue siendo para mi una de las mejores. Muy recomendable.