2003-07-17 16:59
Su charla se centró, principalmente, en un par de ideas sobre a dónde puede ir a parar la informática en el futuro, sobre todo mirando a dóndoe ha ido en el pasado, y cómo las predicciones en informática han sido las que más han fallado de entre todas las ciencias (en los 50 ya se predijo que, por ahora, habría máquinas inteligentes). En realidad, dijo Bruce Sterling, lo que hacen los ordenadores no es pensar, sino clasificar, elegir y conectar.
Sus ideas fueron las siguientes: primero, el surgimiento de máquinas y diseños que no han sido hechos por el ser humano directamente, sino que son consecuencia de un proceso de evolución hecho dentro de una máquina; y lo hizo poniendo como ejemplo el trabajo de
Jordan Pollack, en la universidad de Brandeis. Incidentalmente, mencionó que de la investigación universitaria era de donde cogían las ideas los escritores de ciencia ficción; qué alivio ver que servimos para algo.
La segunda idea se refirió al trabajo de
Adam Heller sobre nanotubos, estructuras de carbono que son capaces de producir electricidad al hacer pasar fluidos por ellas; los nanotubos, insertados dentro del torrente sanguíneo, o dentro de células, y pegados a nanomáquinas, podían convertirse en picoordenadores inteligentes, capaces de ayudar a que un músculo, por ejemplo, sea más eficiente; en realidad, dijo, quizás en vez de crear un cerebro artificial sería mucho mejor, y ayudaría más a la gente, crear piel artificial (y entender primero cuales son todas las funciones de la piel) o un hígado artificial que un cerebro artificial. Pero lo interesante para él es qué puede significar ese avance, y qué tipo de sensación llevaría asociada.
Durante el turno de preguntas, respondió a diferentes temas relacionados con la construcción, y con Windows: dijo que se estaba pasando al software libre, pero que por lo pronto los procesadores de textos Open Source le estaban decepcionando, pero afirmó que un verdadero cyberpunk debería usar procesadores de textos open source. También le pareció una barbaridad el incluir gestión de derechos digitales (DRM; digital right management) dentro de los ordenadores, porque los ordenadores deben de estar para extender lo que puede hacer una persona, no para restringirlo... y también dijo que Windows es tan complicado que acabará siendo peligroso de usar.
En fin, una charla extensa, entretenida, llena de ideas, y que inspirará a más de uno de entre los que estábamos allí.